Personalidad Eneatipo 6: El Leal y Colaborador
Personalidad del eneatipo 6: por qué le cuesta tomar desiciones
La personalidad del eneatipo 6 se caracteriza como el colaborador y leal, pero también el que duda, porque teme tomar decisiones,
Este eneatipo es el que busca seguridad, pero duda y desconfía. Necesita sentirse protegido y seguro.
Desarrollo de la personalidad del eneatipo 6
Para el eneatipo 6, su infancia se sintieron cuidados, pero probablemente de una manera hosca y poco cariñosa.
Es común también que uno de los progenitores fuera ambivalente.
No saber qué hacer ni cuándo genera duda y desconcierto.
También es probable que hayan tenido un progenitor bastante invasivo, que les guiaba en exceso.
Eso hace que no confíe en sí mismo y que no se crea capaz de sobrevivir en este mundo. Viven en alerta constante.
Su pasión es el miedo, ya que creen que el mundo está lleno de peligros. Muchos seis de hecho, tienen miedo a tener miedo.
Y este miedo hace que se paralicen las emociones y, por tanto no se puedan conectar con ellas y se hiperactive la mente.
Es como una centrifugadora que no para.
Todas las personas del eneatipo seis tienen en común el imaginar qué puede salir mal en una situación.
Tienen previstos de antemano todos los escenarios negativos posibles para saber qué hacer si algo ocurre.
Esto, en teoría, les da seguridad, pero es algo que se convierte en perjudicial porque apoya un estado de alerta inconsciente.
Viven enfocados a futuro, como en una partida de ajedrez. No suelen actuar según sienten. Primero piensan lo que deben hacer o decir.
Eneatipo 6: leal y colaborador
Caracteríasticas de la personalidad del eneatipo 6: ansiedad y angustia
Es muy propio de las personas del eneatipo 6 sentir ansiedad y angustia.
Los seis tienen una sensación interna de inseguridad a la que a través de su mente dan explicación, poniéndola fuera.
Es decir, que pueden creer que tienen ansiedad, angustia o miedo por lo uno o por lo otro que han buscado de forma lógica.
Pero es un producto de su mente para dar explicación a esa sensación interna de continua falta de seguridad.
Para el seis siempre tiene que haber un culpable. Si son ellos tienen introyectado el merecer un castigo, pero también proyectan bastante.
La proyección es su mecanismo de defensa y la utilizan para quitarse responsabilidad de sus impulsos, deseos o sentimientos que no casan con la autoimagen que han considerado sobre sí mismos.
Tienen previamente el miedo y las preocupaciones y lo fijan en alguien. “Si yo desconfío de ti no es porque sea desconfiado, es porque tú me das motivos”.
“Si algo va mal y yo no soy culpable, igual es el otro el que tiene que ser castigado”. Se les da bien señalar lo que hacen otros incorrectamente. “Mi mal humor es porque tú haces todo mal….”
Las personalidades del eneatipo 6 tienen más facilidad para pasar a la acción que a su interior. Son de objetivos. Suelen tener algo que hacer o que conseguir.
Suelen tener falta de seguridad interna y por eso necesitan sentir poder.
No se sienten genial, pero sí quieren sentirse así, por lo que viven con metas y objetivos a realizar con la idea de sentirse mejores.
Valoran más a los demás y a sí mismos por lo que hacen que por lo que son.
En sus relaciones está la palabra autoridad o poder.
Si no pueden mandar, se acostumbran a obedecer. Su relación con la autoridad es ambivalente, no terminan de confiar, aunque lo necesitan.
Su mente es muy dual y clasifica entre amigos y enemigos. Aunque cuando alguien consigue su confianza son muy leales.
Buscan estar seguros de todo y pueden buscar a alguien que sea un pilar, en las leyes, normas o reglamentos.
Tienen mucho miedo de que sus actos puedan perjudicarles a ellos mismos o a otros. Esta ambivalencia les ocurre en muchos terrenos, no solamente con la autoridad.
Son cálidos y también fríos, extrovertidos e introvertidos, bromistas y luego directos… Pueden manejarse en cambios rápidos.
Qué puede hacer el eneatipo 6 para sanar
Para sanar son importantes varias cosas:
1. Ser consciente de dónde viene esa sensación de inseguridad.
2. Tratar de evitar la acción. Es decir, tolerar esa sensación de inseguridad y aprender a transitarla sin buscar soluciones que solamente la palian de forma momentánea.
Sostener la sensación temerosa interna.
3. Confiar en la vida y en uno mismo y apoyarte en esa confianza.
4. Aceptar que siempre hay algo que puede fallar, pero saber detectar si nuestras preocupaciones son normales o exageradas.
Subtipos del eneatipo 6
Existen tres subtipos de cada eneatipo.
Eneatipo 6 conservación.
A este eneatipo le gusta estar en casa, tiene muchas cosas que solucionar siempre.
Duda mucho y se siente culpable de sus actos. Es cercano y dulce y tiene miedo al castigo y a sus consecuencias.
Les gusta sentirse cuidados y protegidos. Sienten que si se relajan pasará algo malo.
Es posible que busquen a alguien que sea un pilar para ellos, con leyes, normas y reglamentos.
Tienen mucha necesidad de aprobación y mucho miedo al juicio y evitan la confrontación.
Son personas gentiles, pacíficas, amables y delicadas y pueden utilizar el humor como forma de comunicación.
Eneatipo 6 social.
Este eneatipo vence al miedo siguiendo las normas y sabiendo qué hay que hacer en cada sitio.
Son muy “normales”, no destacan en general ni por arriba ni por abajo y odian a los fanfarrones. Son algo rígidos y a veces les cuesta soltarse. Se les llama prusianos.
Tienen muy controlado saber a qué atenerse. Creen que hacer las cosas con responsabilidad es importante y si no se enfadan con la sociedad.
Pueden ser precisos, buenos comunicadores y eficientes, aunque también pueden anteponer el fin a los medios y luchar contra lo que consideran injusto cuestionando incluso a la autoridad. Son muy de grupo.
Eneatipo 6 sexual.
Son desconfiados, un poco paranoicos, hipervigilantes y buscan, igual que los otros dos subtipos, sentirse seguros.
El miedo les genera inseguridades y eso también les proporciona incertidumbre. Todo lo que hacen es por y para alejarse del miedo.
Pueden tener cambios bruscos de carácter.
A veces incluso se confunden con el 8. Son temerarios, bravucones y atacan antes de ser atacados.
Es característico que el miedo se reprima y salga de golpe.
Interiormente se siente débil y asustado pero nada le da más miedo que su propia vulnerabilidad y actúa de forma contrafóbica.
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Autora: Zinnia Rodríguez
